miércoles, 16 de diciembre de 2009

Santiago, Capital de la república de Chile.

Todo el día pensando en qué si escribiría o no cuando llegara a mi casa. ¿Sobre qué escribir si me la pasaba redactando cosas buenísimas mentalmente que después se me olvidaban en cosa de segundos?

A ratos creo que escribir o redactar cualquier cosa es como fumar para algunos, solo que el sabor es distinto. Vicio o no era una forma para liberar las atormentadas historias que vagan por mi mente y que me detienen para reflexionar sobre vidas ajenas donde algunas son paradisiacas y otras se vuelven "miseria y hambre" comparadas con la mía.

La enseñanzas del día eran bastantes, ser cesante en Chile implicó para una de mis compañeras de trabajo pasar hambre durante todo un mes..."la dieta obligatoria" consistía en una tostada y una taza de té que duraba para todo el día. Sin embargo, al otro extremo y peor aún en la país y ciudad se encuentra una de las clientas que atiende la misma vendedora de hace un rato, solo que esta vez la cliente posee una "Dieta voluntaria" con un sueldo suculento y con genes en su cuerpo totalmente privilegiados para la afamada clase ABC1.

Vivo en un país que se llama Chile, lugar que tiene mundos completamente distintos y realidades tan extremas que parece ser una broma de Dios pero de esas de mal gusto. En esta patria puedes encontrar una calle con casas de 2x2 y basta con mirar en frente para notar que la otra cuadra tiene a sus acomodados habitantes con una 4x4. ¿Será entonces que el tema no es una broma?

Cuicos flaytes- flaytes rascas- Cuicos pelolais- Famosos picantes- Famosos cototos- Flaytes aspirando a cuicos y cuicos espantados de esos mismos flaytes.

Da lo mismo, somos todos iguales ante Dios. Pero tal parece que la única forma de entender este asuntos es teniendo en claro que de no ser por dioses distintos, la frase no podría ser, entonces para muchos la religión, la fe y las últimas esperanzas de surgir no tendrían sentido.


Bienvenidos al Parque Arauco, Aquí puedes encontrar a gente "humilde" atendiendo como se merece a nuestra clase social privilegiada. A $800 la hora en el mejor de los casos. ¿Podrías vivir con eso?

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